ad sidera visus

Rodrigo Díaz nació en Vivar, pequeña aldea a la vera del camino de Burgos, el año 1043. Su padre, Diego Lainez, le aleccionó en el manejo de las armas y a montar a caballo, pero en la batalla de Atacapuerta, 1054, recibió heridas que la causaron la muerte en 1058, teniendo Rodrigo 15 años.Estatua del Cid Campeador en Burgos. Por Juan Cristóbal.

El rey Fernando I de León (1037-1065) casado con Sancha de Navarra tuvo tres hijos y dos hijas: Sancho, Alfonso, Ramiro,  Elvira y Urraca. Sus dominios los repartió dando a Sancho Castilla, reino que recibió de su padre; Alfonso León; a Ramiro Galicia; y Elvira y Urraca villas y fortalezas.

El tío abuelo don Rodrigo, Nuño Álvarez, solicitó al rey Fernando que en reconocimiento de los servicios prestados por Diego Lainez su hijo Rodrigo fuera admitido en la escuela de magnates del reino, donde aprendería a leer, escribir, conocer las leyes,  practicar el manejo de las armas y conocer y congeniar con Sancho, primogénito del rey Fernando.

Con el tiempo Sancho nombraría a Rodrigo “caballero” y le ceñiría la espada.

 

Hazañas de Rodrigo

La Corte de León acordó la marcha para conquistar Coimbra. La mesnada de Fernando dejó León,  llegando  a los muros de Coimbra y se la puso sitio. Los sitiados pidieron ayuda a los musulmanes de Badajoz. De poco sirvió la ayuda que prestaron y a los cuatro meses de sitio Fernando ordenó el asalto a las murallas mediante escalas Uno de los primeros en escalar fue Rodrigo.

Ocupadas las murallas el gobernador musulmán rindió la Plaza.  Las “hazañas” de Rodrigo corrían de boca en boca por toda la Corte, lo que la alta nobleza leonesa no podía soportar “que un castellano estuviera por encima de ellos”. León era un reino y Castilla un simple condado.

Ordalías de Rodrigo

Sancho de Castilla reclamaba la aldea de Pazuengos, cercano está el monasterio de San Millán de la Cogolla. El rey de Pamplona propuso que los monjes fueran jueces en esta cuestión,. Los monjes no encontraron motivos para  resolver la reclamación. La solución “Que lo decida Dios” , es decir, una Ordalia.

El rey, de Pamplona, de Nájera y de la Rioja eligió para esta Ordalia al caballero Jimeno Garcés de Azagra, alférez real. Sancho, rey de Castilla, eligió a Rodrigo portaestandarte real Las acometidas del navarro las esquivaba Rodrigo.

Rodrigo se mantuvo a la defensiva, hasta que con un mandoble de abajo a arriba le clavó la espada en la axila, cayendo Jimeno sobre un charco de sangre.

El rey de Castilla, Sancho, no recibía los tributos que debía dar el rey de Zaragoza y decidió ir a Zaragoza, ponerla sitio y obligar así al pago de las deudas.

Puesto el cerco, un visir se presentó en el campamento prometiendo el pago tan pronto como levantaran el cerco.

Sancho no lo aceptó. La solución quedaba en el campo del honor, en la Ordalia.

El caballero castellano seria Rodrigo y por la parte zaragozana un gigantesco guerrero llamado Fariz.

Fariz se lanzó en loca carrera con su caballo, Rodrigo quieto y seguro esperó la llegada y en ese momento se tumbo del lado izquierdo del caballo y la lanza levantada se clavó en el cuello de Fariz, cayendo del caballo, herido de muerte.

El reino de Zaragoza se convirtió en vasallo del de Castilla y Al-Mutaqdir pagó lo que debía.

Las proezas de Rodrigo las cantaron los juglares por toda Castilla.

Desde entonces se vino a llamar a Rodrigo el “Campeador”.          

Sancho en 1068 convocó una curia, a la que acudió su hermano Alfonso. En esta reunión don Sancho reclamó el reino de León, lo que Alfonso no admitió. Como no había acuerdo llegaron a resolverlo en  una batalla en los campos de Llantada.

Las fuerzas de don Sancho serian mandadas por Rodrigo y las de Alfonso por el alférez leonés.

A la primera carga de los castellanos y su posterior maniobra los leoneses se dieron a la fuga incluso el alteres.

En Burgos se celebró una curia con asistencia de Alfonso por la incapacidad de gobierno que tenia Ramiro, rey de Galicia.

Acordaron despojar a Ramiro, dejando la mitad de Galicia para Alfonso y la otra mitad para Sancho.

El gobierno compartido de Galicia no era posible y se decidió en una batalla en los llanos de Golpejera, cercano a Carrión

La batalla se celebro en 1071. Del lado castellano 300 caballeros mandados por Rodrigo y a su lado don Sancho. Los leoneses contaban con 400 caballeros y a su frente Alfonso y su alférez.

La carga de los castellanos fue terrible  y la victoria cayó del lado castellano, Alfonso apresado, con cadenas llevado a León

Para someter a la ciudad de Zamora, de la infanta doña Urraca, Se puso sitio a Zamora ofreciendo a Urraca el dominio de tres ciudades castellanas a cambio de la entrega de Zamora.

La oferta fue rechazada y el sitio se mantenía. Sancho durante un recorrido acompañado de caballeros hubo de apartarse por razones naturales que aprovechó un asesino para con su lanza atravesarle el corazón.

Ni se supo ni se sabrá de quien partió la idea del asesino, de doña Urraca, de don Alfonso.

Con la muerte de don Sancho sin tener descendencia, el reino de  Castilla lo heredaría su hermano Alfonso.

Los nobles castellanos exigían para su reconocimiento como rey de Castilla  que Alfonso jurase no haber tenido parte en la muerte de don Sacho."La jura de santa Gadea" (1864), de Marcos Hiráldez de Acosta (Senado)

En fines de 1072 en la iglesia de Santa Águeda, de Burgos, fue don Rodrigo quien requirió el juramento del rey, Alfonso VI

Automáticamente don Rodrigo cesó como alférez mayor.

Alfonso rey de Castilla y León llamó un día a Rodrigo y le  dijo debías casarte con una joven guapa, como Jimena, hija del conde de Oviedo y de doña Cristina, bisnieta del rey Alfonso V de León.

En los esponsales dijo don Alfonso: Mañana 20 de julio de 1074 se celebrará el matrimonio de mi prima doña Jimena con nuestro valeroso caballero Rodrigo Díaz de Vivar.

Habiendo quedado el reino de Navarra sin su rey, Sancho, consideró Alfonso ocasión propicia para ocupar tierras de ese reino.

Alfonso se entrevistó con el rey de Aragón a fin de acordar reparto de tierras del reino de Navarra. Sin lucha fueron incorporadas a Castilla Alava, Vizcaya y las ciudades de Nájera, Logroño y Calahorra, de La Rioja.

En la primavera de 1079 enfermó y murió Inés,  mujer del rey Alfonso y ya viudo, contrajo matrimonio con Constanza, hija del poderoso duque de Borgoña.

Rodrigo recibió la orden de ir a Sevilla para reclamar las “parias” que debía a Castilla. Rodrigo presentó la reclamación  al rey de Sevilla, Al-Mutamid. Este respondió con una promesa y la condición de recibir el apoyo de Rodrigo en su lucha contra Granada. Rodrigo aceptó y se puso en marcha hacia Granada.

Castilla mandó a Garcia Ordoñez  para reclamar a Granada sus deudas.

Con el mismo fin, pero por caminos distintos, se encontraron Rodrigo y Garcia Ordoñez.

Rodrigo atacó con tal ímpetu que las fuerzas de Garcia huyeron.

Rodrigo regresó a Sevilla tras cumplir su misión. Al-Mutamid

le recibió, agradeció y pagó sus deudas.

Rodrigo regresó a Burgos y Alfonso reconoció la labor realizada por Rodrigo y le concedió la posesión de varias heredades de la Corona y una bolsa de monedas de oro y plata         

Rodrigo se tomó un tiempo de descanso.

Doña Jimena dio a luz a una niña, Maria.

Garcia Ordoñez recordando su derrota ante Rodrigo y a fin de vengarse de él  manifestó  al rey Alfonso falsas acciones de rebeldía. El rey de Castilla y León lo creyó y escribió el siguiente  diploma: He dispuesto que en el plazo de nueve dias mi vasallo Rodrigo Díaz de Vivar salga de nuestras tierras. Rodrigo no tenía más posibilidades que refugiarse en Zaragoza, Valencia o en el condado de Barcelona.

Rodrigo solicitó al rey de Zaragoza ser acogido. Respondió el heredero, Al-Mutamin, dando conformidad.

El príncipe heredero hablaba nuestro idioma y sin intérpretes nos podíamos comunicar. Al-Mutamin, encomendó a Rodrigo la supervisión de sus tropas.

Rodrigo tenía fama de haber ganado en tantas batallas en cuantas había intervenido, dicen que tiene baraca fortuna.

Al-Mutamin encargó a Rodrigo recuperar el castillo de Escarp, liberar las plazas de Monzón y Almenar, ocupadas por el rey de Aragón. Todo esto lo consiguió Rodrigo.

Al regreso a Zaragoza fue recibido como verdadero héroe. La gente gritaba ¡Sid, Sid!, que en árabe significa león. Más tarde dijeron “Sidi” que quiere decir señor.

De aquí que recibiera el apodo de “El Cid”.

Por la reciente ayuda que Rodrigo prestó al rey de Castilla y León, éste le perdonó y le ofreció poder volver a su Estado y a su servicio.

Sancho Ramírez, rey de Aragón, venia ocupando tierras zaragozanas, conquistando castillos y la plaza de Bolea. Rodrigo recuperó Bolea.

Al-Mutamin ordenó a Rodrigo se dirigiera hacia el Este para recuperar Morella, ciudad sobre una alta e inexpugnable  montaña rocosa. Rodrigo no pudiendo entrar en la plaza, ni rendirla por hambre se limitó por asolar las tierras de los contornos de la ciudad.

Al-Mundir, rey de Lérida se puso de acuerdo con Sancho Ramírez, rey de Aragón, para combatir a las fuerzas de Rodrigo que asolaban los contornos de Morella.

Al encuentro, Sancho Ramírez atacó con su caballería pesada, Rodrigo aguantó la carga, aplicó su táctica de envolver al enemigo por su espalda mediante la caballería ligera. El rey de Aragón se vio perdido y huyó junto con sus caballeros.

Alfonso, rey de Castilla y León, quiso conquistar Toledo, que fue capital del reino Godo, mediante un prolongado cerco.

Con esta conquista pretendía ser “Emperador de Hispania”.

Sin recibir ayuda alguna, Toledo se rindió en mayo de 1085.

Alfonso ordenó a Rodrigo fuera a Galicia para someter a los que en ella se habían sublevado y en 15 dias  fueron presos.

Interesados por Valencia están el rey de Lérida, el conde de Barcelona y los  Almorávides.

A fines de 1089 el panorama que se contemplaba era muy confuso: cambiaban las alianzas entre reinos, como cambian las nubes en los cielos, se encontraban soberanos sin corona, señores sin vasallos, obispos sin diócesis y diócesis sin obispo.

Solo don Rodrigo tenía las ideas claras: ser nuestros propios señores, atendiendo nuestros intereses y su intención de someter a Valencia a su protectorado.            

El conde de Barcelona con 6.000 hombres marcharon al pinar de Teva donde se encontran las fuerzas de Rodrigo.

A la acometida de las fuerzas del conde, Rodrigo se puso en primera fila, espoleó al caballo en dirección a los catalanes. La caballería de Rodrigo cayó sobre el enemigo, éstos empezaron a retroceder y a huir.

En el fragor del combate el caballo de Rodrigo se encabritó, cayo sobre los cuartos traseros, cayendo al suelo, atrapando a

Rodrigo con fractura de una pierna y dos costillas rotas.

Ahora la meta de Rodrigo era apoderarse de Valencia, bien por asalto, bien por sitio.

Encontró Rodrigo lo que buscaba un cerro, Peña Cadiella, para base de su campamento en otoño de 1091.

Los almorávides ocuparon Valencia. Rodrigo con sus fuerzas  se puso en camino a Valencia y llegó a Cebolla. Y no teniendo posibilidad de ocuparla, realizaban correrías por las cercanías de Valencia, mantiéndola cercada. En 1093 el cerco resultaba asfixiante ya que no recibían ayuda del exterior.

 En el verano Cebolla se rindió. Ocupada Cebolla el campamento de Rodrigo se instaló en un lugar llamado Mestalla. Valencia quedaba en las manos de Rodrigo.

El 15 de junio las puertas de Valencia se abrían al Campeador

A mediados de octubre llegaron 12.000 almorávides a distancia de una jornada de Valencia. Rodrigo estaba dispuestos a vencer con pocos a muchos o a morir en la lucha. Rodrigo planeó: de noche emboscar parte de nuestra caballería cerca del campamento de los almorávides, en cuanto amanezca el resto de nuestras fuerzas saldrán de Valencia presentando batalla y ante la respuesta enemiga nuestras fuerzas fingirán huir para que les persigan y en ese momento los caballeros emboscados les atarán por la espalda.

Se hizo así y los musulmanes se dispersaron en desbandada Rodrigo empleó la táctica denominada “la tornada”, maniobras diversivas y otra envolvente o de “copo”.

La figura del Cid

Tuvo que enfrentarse, luchar y vencer:

En Coimbra venciendo a los musulmanes y conquistó la Plaza;

En Pazuengos donde en Ordalia venció al alférez real;

En Zaragoza venció en Ordalia al guerrero Fariz;

En Llantada venció en batalla a los caballeros leoneses;

En Golpejera en batalla venció a los leoneses de Alfonso VI;

En Zamora para someter los dominios de doña Urraca;

Camino de Granada se encontró y venció a Garcia Ordoñez.

Recuperó el castillo de Escarp, las plazas de Monzón,  Almenar y Bolea ocupadas por el rey de Aragón, Sancho Ramírez, vencido por la superioridad táctica de Rodrigo-

En Valencia venció al conde de Barcelona y a los almorávides

La figura del Cid es Histórica y Legendaria ya que esta documentada y fue cantada por juglares.

El Cid fue admirado por sus amigos  y respetado por enemigos.  Es la personificación del  honor y del valor

Famosa es su espada, la “Tizona”.

El Cid murió el 10-7-1099.