Nacimiento y vida de Pablo
Saulo Pablo nació entre el año 5 y el año 10 en Tarso (en la actual Turquía) ciudad de la provincia romana de Cilicia, en la costa sur del Asia Menor.
Fue contemporáneo de Jesús de Nazaret. Tuvo por nacimiento a lengua griega. Utilizó la Septuaquinta, traducción al griego de los textos bíblicos, empleada por las comunidades judías del mundo antiguo. Esto concuerda con el perfil de un judío de la diáspora nacido en una ciudad helenística.
Tarso tenía importancia comercial y centro de una escuela de filosofía estoica, centro de cultura, filosofía y enseñanza.
Tenía concedida la ciudadanía romana por nacimiento. Por tanto, Pablo era ciudadano romano a pesar de ser hijo de judíos. Por ser ciudadano romano fue trasladado a Roma tras su detención en Jerusalén
Fue educado en Jerusalén e instruido por el famoso rabino y fariseo Gamaliel, lo que sugiere su preparación para ser rabino
En resumen, Saulo de Tarso sería un judío de profundas convicciones y estricto seguidor de la Ley mosaica.
Según una de sus epístolas en la mitad de los 50, Pablo no estaba casado, sin aclarar si lo era por haberse divorciado o enviudado. Esta cuestión puede relacionarse con el “Privilegio paulino” establecido por Pablo y que consiste en el derecho que tiene a romper el vínculo matrimonial la parte cristiana cuando la otra parte es infiel y no se aviene a vivir con ella pacíficamente.
Saulo Pablo perseguidor.
Saulo, Pablo, probó la lapidación de Esteban, el protomártir. Los testigos de la lapidación de Esteban pusieron sus vestidos a los pies de Saulo.
En la primera persecución cristiana Saulo, Pablo, se presenta como alma de la persecución, sin respetar a las mujeres y llevar a la cárcel a los cristianos. Pablo señaló que entraba en las sinagogas azotando y encarcelando a los que creían en Jesús de Nazaret.
La conversión
Después del martirio de Esteban, Saulo Pablo se dirigió a Damasco.
Entre tanto, Saulo respirando amenazas y muertes contra los discípulos del Señor se presentó al sacerdote y le pidió cartas para llevar cristianos a la ciudad de Jerusalén.
Cuando estaba cerca de Damasco, de pronto una luz venida del cielo le cegó y cayó en tierra, oyendo una voz que decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Saulo respondió: ¿Quién eres, Señor? El Señor respondió: “Yo soy Jesús, a quien tú persigues”. Levántate, entra en la ciudad y se te dirá lo que debes hacer. Los hombres que le acompañaban sobrecogidos por la voz que oyeron, sin ver a nadie, se detuvieron. Saulo se levantó y con los ojos abiertos nada veía. Los que le acompañaban le cogieron de la mano y le llevaron a Damasco, donde pasó tres días sin ver, comer, ni beber.
En Damasco, Ananías le curó de su ceguera, imponiéndole las manos, fue bautizado y permaneció unos días
Este acontecimiento, fuera una “aparición”, una “visión” o una “inspiración”, en realidad cambió su vida, hasta entonces dedicado a “perseguir encarnizadamente” y “asolar con celo” a la “Iglesia de Dios”, transformó su pensamiento y comportamiento.
No abandonó sus raíces judías, pero permaneció fiel a aquella experiencia.
Ministerio temprano.
Comenzó su ministerio en Damasco y en Arabia. Fue perseguido por el “etnarca” Aretas IV. Huyó a Jerusalén. Bernabé le presentó a Pedro y Santiago, conversando con ellos.
Bernabé y Pablo fueron a Antioquia, donde surgió la denominación de “cristianos” a los seguidores de Cristo. Antioquia se convertiría en el centro de los cristianos convertidos del paganismo.
Viajes misioneros.
A partir del año 46 comienzan los tres grandes viajes misioneros de Pablo. Los hacia generalmente a pie.
Su primer viaje: desde Atalía, hasta Derbe. Ida y vuelta suponen 1000 km.
Segundo viaje: desde Tarso hasta Tróade, recorriendo casi 2000 km.
Tercer viaje: desde Tarso hasta Efeso poco más de 1000 km.
Otros desplazamientos fueron por tierras y por mares. Recorrió caminos difíciles y de diferentes altitudes, con peligro de salteadores, en campos y en ciudades.
Concilio de Jerusalén.
En este Concilio se aprobó la opinión de Pablo “no imponer el ritual judío de la circuncisión a los conversos”, este acuerdo implicó un avance en la liberación del cristianismo primitivo de sus raíces judías para abrirse al apostolado universal.
Pablo denuncia la inutilidad de las prácticas cultuales judías a efectos de la salvación, ya que ésta es don gratuito de Dios por el sacrificio de Cristo.
Muerte de Pablo.
En las proximidades de Roma caminaba Pablo junto a “lictores”, pues un juez romano le condenó a ser decapitado.
Una espada le cortó el cuello y la cabeza cayó. Era el año 67
Epístolas de San Pablo a :
Tesalonicenses; Colosenses; Gálatas; Romanos; Filipenses; Efesios; Corintios; Hebreos; Filemón; Tito; Timoteo;
Pablo de Tarso
Esencialización
Nacimiento y vida de Pablo
Saulo Pablo nació entre el año 5 y el año 10 en Tarso (en la actual Turquía).
Fue contemporáneo de Jesús de Nazaret.
Tuvo por nacimiento a lengua griega. Utilizó la Septuaquinta, traducción al griego de los textos bíblicos. Tarso tenía importancia comercial y centro de una escuela de filosofía estoica, centro de cultura, filosofía y enseñanza.
Tenía concedida la ciudadanía romana por nacimiento. Por tanto, Pablo era ciudadano romano a pesar de ser hijo de judíos.
Por ser ciudadano romano fue trasladado a Roma tras su detención en Jerusalén.
Fue educado en Jerusalén e instruido por el famoso rabino y fariseo Gamaliel.
Saulo de Tarso sería un judío de profundas convicciones y estricto seguidor de la Ley mosaica.
Según una de sus epístolas en la mitad de los 50, Pablo no estaba casado, sin aclarar si lo era por haberse divorciado o enviudado. Esta cuestión puede relacionarse con el “Privilegio paulino” establecido por Pablo y que consiste en el derecho que tiene a romper el vínculo matrimonial la parte cristiana cuando la otra parte es infiel y no se aviene a vivir con ella pacíficamente.
Saulo Pablo perseguidor.
Saulo, Pablo, aprobó la lapidación de Esteban. Los testigos de la lapidación de Esteban pusieron sus vestidos a los pies de Saulo. En la primera persecución cristiana Saulo, Pablo, se presenta como alma de la persecución, sin respetar a las mujeres y llevar a la cárcel a los cristianos.
La conversión.
Después del martirio de Esteban, Saulo Pablo se dirigió a Damasco.
Entre tanto, Saulo respirando amenazas y muertes contra los discípulos del Señor.
Cuando estaba cerca de Damasco, de pronto una luz venida del cielo le cegó y cayó en tierra, oyendo una voz que decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?. Saulo respondió: ¿Quien eres, Señor? El Señor respondió: “Yo soy Jesús, a quien tú persigues”. Levántate, entra en la ciudad y se te dirá lo que debes hacer.
Los que le acompañaban le cogieron de la mano y le llevaron a Damasco, donde pasó tres días sin ver, comer, ni beber.
En Damasco, Ananías le curó de su ceguera, imponiéndole las manos, fue bautizado y permaneció unos días.
Este acontecimiento, fuera una “aparición”, una “visión” o una “inspiración”, en realidad cambió su vida.
Ministerio temprano.
Comenzó su ministerio en Damasco y en Arabia. Fue perseguido por el “etnarca” Aretas IV.
Huyó a Jerusalén. Bernabé le presentó a Pedro y Santiago, conversando con ellos.
Bernabé y Pablo fueron a Antioquia, donde surgió la denominación de “cristianos” a los seguidores de Cristo.
Viajes misioneros.
Apartir del año 46 comienzan los tres grandes viajes misioneros de Pablo, los hacia generalmente a pie.
Su primer viaje: desde Atalía, hasta Derbe. Ida y vuelta suponen 1000 km.
Segundo viaje: desde Tarso hasta Tróade, recorriendo casi 2000 km.
Tercer viaje: desde Tarso hasta Efeso poco más de 1000 km.
Recorrió caminos difíciles y con peligro de salteadores, en campos y en ciudades.
Concilio de Jerusalén.
En este Concilio se aprobó la opinión de Pablo “no imponer el ritual judío de la circuncisión a los conversos”, este acuerdo implicó un avance en la liberación del cristianismo primitivo de sus raíces judías para abrirse al apostolado universal.
Pablo denuncia la inutilidad de las prácticas cultuales judías a efectos de la salvación, ya que ésta es don gratuito de Dios por el sacrificio de Cristo.
Muerte de Pablo.
En las proximidades de Romacaminaba Pablo junto a “lictores”, pues un juez romano le condenó a ser decapitado. Una espada le cortó el cuello y la cabeza cayó. Era el año 67.